Page 41 - Psicoesfera_Regular8_40
P. 41

opusiera a sus decisiones. Siendo justas, Kenshiro no tenía la reputación
               de otros hombres en su situación, aunque no dejaba de ser un CEO. Esta-
               ba más interesado en medrar en su campo que en conseguir más aman-
               tes. Necesitaba que su prestigio jamás se viera amenazado, así como su
               infinito ego. No era ningún secreto que, siendo personas tan poderosas,
               a veces, las mujeres de los CEO venían a sufrir algún desafortunado acci-
               dente o simplemente desaparecían para no volver a ser vistas nunca.



               Con los medios de comunicación en su bolsillo y las autoridades a su dis-
               posición, jamás se verían amenazados por las consecuencias de sus actos.
               Los Zaibatsus no están sujetos al escrutinio público, no son noticia, a na-
               die importa lo que manejan los grandes magnates tras las cortinas.













                                                                                                                     Revista PsicoEsfera












                                                                                                                     41
   36   37   38   39   40   41   42   43   44   45   46